Ayer, día 15 de Mayo, se clausuró el I Festival de Poesía Infantil "Verso en nubes", jornada a la que tuve el placer de asistir.
Os dejo aquí esos versos por si os apetece leerlos.
ME GUSTA QUE LLUEVA
Me gusta que llueva,
No quiero el paraguas,
prefiero mojarme
me paro en la calle,
y me empapa el agua.
Me entra la risa,
Ya en casa, tranquilo
me cambio de ropa
y me tomo la sopa
que mamá me hizo.
¡Me encanta que llueva!
Sobre los cristales
de los ventanales
el agua golpea.
AGUA
Dame agüita clara
del arroyo fresco
para lavar el vestido
de terciopelo.
Dame agüita clara
del arroyo azul
para regar la tierra
del abedul.
Dame agüita, madre,
que se seca el huerto,
no quiero que se quede
como un desierto.
Dame agua bien fresca
en este verano,
la beberé a la sombra
del avellano.
Agua de la luna,
de la luna llena,
para que te siente
mejor la cena.
agua transparente,
de luna menguante
agua refrescante.
Agua de vida,
de lluvia o de sol.
Agua tranquila
la de mi canción.
Allí me encontré con Asunción Carracedo (como ya he dicho más veces, alma de este Festival y de muchas otras cosas) y además pude conocer a María García Esperón, Rosa Serdio, Francisco Velasco, Antonio G. Teijeiro, Pedro Villar... y muchos otros autores que formaron parte con su voz y su presencia de estos tres días que ha durado el evento en nuestra ciudad.
Dolores Insa nos mostró todo lo que las nuevas tecnologías pueden hacer en favor de la poesía (y de los poetas) a través de una magnífica charla y con las imágenes de su Blog: http://bibliopoemes.blogspot.com/, y nos recordó lo importante que es la implicación de las familias en la formación de nuestros hijos (formación no sólo cultural, sino formación como personas), en el rescate de lo que se está perdiendo con el ajetreo de esta vida que llevamos: la lectura, la conversación, el acercamiento a nuestros hijos antes de que se alejen del todo.
Casi para terminar, el cantautor leonés José Emilio Rimada nos hizo cantar a todos al son de su guitarra y arropados con las letras de Espronceda o Goytisolo tarareamos la Canción del Pirata hasta terminar aplaudiéndole con todas las ganas.
El cielo de León quiso regalarnos un día despejado para que volasen por él todas las nubes de versos atadas a los globos de colores que salieron despavoridos con rumbos infinitos.
Ojalá sean recibidos con la misma ilusión con la que fueron enviados.
Tengo que decir que tuve el atrevimiento (gracias a la generosidad de mi amiga Asunción) de leer dos de mis poesías infantiles, escoltada por maestros poetas que hicieron que me sintiera pequeñísima y enorme a la vez.
ME GUSTA QUE LLUEVA
Me gusta que llueva, me meto en los charcos,
y voy dando saltos con las botas nuevas.
No quiero el paraguas,
prefiero mojarme
me paro en la calle,
y me empapa el agua.
Me entra la risa,
mamá en la ventana
me mira asombrada
y baja deprisa.
¡Ya casi me alcanza!
Se ríe conmigo,
me pone un abrigo
y luego me abraza.
me cambio de ropa
y me tomo la sopa
que mamá me hizo.
¡Me encanta que llueva!
Sobre los cristales
de los ventanales
el agua golpea.
AGUA
Dame agüita clara
del arroyo fresco
para lavar el vestido
de terciopelo.
Dame agüita clara
del arroyo azul
para regar la tierra
del abedul.
Dame agüita, madre,
que se seca el huerto,
no quiero que se quede
como un desierto.
Dame agua bien fresca
en este verano,
la beberé a la sombra
del avellano.
Agua de la luna,
de la luna llena,
para que te siente
mejor la cena.
De luna creciente
agua transparente,
de luna menguante
agua refrescante.
Agua de vida,
de lluvia o de sol.
Agua tranquila
la de mi canción.
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