Además de la vendimia, hay otras tareas del campo propias de estas fechas. Geográficamente, nos quedan un poco más lejos a los del norte, pero disfrutamos igual del resultado.
Hoy,, un pequeño recuerdo para algo tan típico de nuestra dieta mediterránea: el aceite de oliva, que muchos niños siguen pensando que sale de... las botellas.
OLIVARES DE JAÉN
De los campos de olivares
de la tierra de Jaén,
salen ricas aceitunas
que dan aceite después.
Pueblan todas las llanuras
los milenarios olivos,
que dan trabajo a la gente
que cuida de su cultivo.
Huele el aire a puro aceite,
a hierbas frescas del campo,
a las tardes con mi padre
que me lleva de su mano.
Golpea con una vara
las ramas de los olivos.
Recoge sobre la lona
aceitunas que han caído.
Echo aceite en la ensalada
o sobre el pan bien tostado,
siento todos los sabores
que del campo me han llegado.
La tortilla es diferente,
la mayonesa también.
Todo sabe de otra forma
si es aceite de los campos
de olivares de Jaén.
(¡Qué hambre más tontorrona me ha entrado!)
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